Los discos de freno son una de las piezas básicas más importantes de nuestro vehículo, se encargan junto con las pastillas de freno de reducir la velocidad cuando lo consideramos necesario. Por este motivo es tan importante su  sustitución y mantenimiento.

Los discos de freno actúan  junto con las pastillas de freno, realizando su función  por fricción,  por lo que  se les consideran  piezas de desgaste. La duración de los discos de freno, es mayor que la de las pastillas, de ahí que sea tan importante la sustitución de las pastillas de freno, para no crear daños mayores.

Como en casi todas las piezas de nuestro coche, el kilometraje, el tipo de conducción, y el tipo de vías por la que circulamos  influyen en el desgaste,  pero como  recomendación es aconsejable sustituir  los discos delanteros cada 120.000km y los traseros cada 240.000km aproximadamente.

Algunos síntomas de que nuestros discos de freno están desgastados

1- Si el pedal del freno se hunde mucho.

2- Si cuando pisamos el freno  se escucha un ruido extraño

3- Si cuando frenamos notamos inestabilidad en nuestro coche.

4- Si notamos vibraciones en el pedal y el volante

Averías más comunes de los discos de freno:

- Discos de frenos rayados

- Discos de freno desgastados

- Discos alabeados por sobrecalentamiento.

Los expertos nos recomiendan revisar el desgaste de estas piezas cada 20.000 km aproximadamente.

Importante: Después de cambiar los discos de freno y las pastillas evita hacer frenadas bruscas al menos durante los primeros 100 km.

Es aconsejable adaptar la conducción y ampliar las distancias de seguridad.

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